Mercerreyas

Por el Angkor más clásico (III)

Lunes, 6 de noviembre de 2017

Angkor Wat
Angkor Wat

 

Ha respetado la lluvia pese al cielo plomizo con que amanecía Siem Reap y, de primeras, he podido volver a alucinar por Preah Khan, un templo fantástico al que, en ocasiones, no se valora como merece. De allí rumbo a Angkor Wat, mastodóntico y siempre sorprendente porque su magnitud deja a la altura del barro a cualquier otro templo por grande que sea, lugar que en cada visita regala nuevas sensaciones escondidas entres su columnas o narradas en bajorrelieves de impacto. Si existe un templo para el que una revisita sea un conocimiento nuevo, ése es Angkor Wat. No hay NADA sobre la faz de la tierra capaz de rivalizar con esta mole que derrocha belleza e ingenio por cada centímetro cuadrado. Ni las hordas de turistas son capaces de restarle un gramo de magia. Y de allí a Wat Bo, un templo de tiempos recientes con unos murales de hace cien años que recuerdan levemente a los tais Wat Nong Bua o Wat Phumin, donde he podido rezar un rato y recordar a los que se me fueron. Inevitable siempre, por decenas de veces cada día, evocar las veces que pasé por aquí con mi madre en 2006 y 2008. Es volver a Siem Reap y soñar con ella. Matemático.

Hasta aquí Camboya, muy batallado esta vez (es lo que me pedía el cuerpo tras el relativo relax vietnamita), un país en el que este año he podido cumplir viejos sueños protagonizados por templos recónditos pero que al fin, con su visita, me han servido de ayuda para comprender la verdadera dimensión histórica y artística de un legado jemer en el que Angkor es solo la punta del iceberg. Mañana rumbo a Tailandia, esto no para, y de allí aprovecharé para hacer una escapada de tres días por algún sitio no muy lejano. Suphanburi es lo primero que he mirado pero realmente no lo sé. Entre esta noche y las horas de bus de mañana le daré una vuelta al asunto.

Written by David Botas Romero
Visit us at:http://botitasenasia.blogspot.com/
E-Mail:botasmixweb@hotmail.com